martes, 26 de agosto de 2008

Paisaje interior


Rescaté este poema que escribí hace muchos años. Su título inspiró este blog. Al leerlo, puedo reconocer algunos rasgos que aún viven en mí. Mi esencia perdura, más allá de las circunstancias. Ahora mi vida sigue girando, pero incorporé a mis hijos. Por un lado, mi hijo carnal, creación divina, y por el otro mi arte, también dador de vida.
Transcribo aquí las primeras líneas:
"Siempre blue jeans,
el pelo suelto, las uñas cortas.
La mochila cargada,
la gente, lo raro ... mezclarme.
El mar, la playa, la arena tibia.
Sentir la piel color del sol.
Y cuando todo se aquieta:
La noche.
Un cielo estrellado, la luna redonda
y una brisa suave, muy suave.
Moverme tranquila, serena.
Unir el cielo y la tierra,
todo en mí,
en mí misma..."